Con la llegada del calor empieza también un periodo delicado para los pies. Debido principalmente al cambio del tipo de calzado como a las nuevas condiciones climatológicas los pies pueden sufrir determinados problemas.
Aquí os detallamos 4 aspectos a tener en cuenta para evitar contagios este verano:
1- La utilización de chanclas o zapatillas a la hora de acudir a piscinas o duchas públicas es importante, ya que evita en muchas ocasiones el contagio por hongos, papilomas e infecciones.
2- Las toallas y calzados han de ser únicamente utilizados por ti, no se deben compartir para evitar posibles contagios de infecciones.
3- El Pie de Atleta, otro de los problemas típicos en verano, es una infección por hongos debida a una sudoración extrema y humedad concentrada en los pies.
4- Prestar atención a las lesiones entre los dedos, durezas, grietas, ampollas, zonas con cambios de coloración, heridas, y uñas encarnadas. Acudir al podólogo siempre que lo considere necesario.