El Colegio Oficial de Podólogos de la Comunidad Valenciana (ICOPOCV)
ha advertido hoy de que poner a los niños zapatos ya usados por otros
puede causar deformidades en los pies de los menores.
Según ha
insistido este colegio profesional en un comunicado, un calzado amoldado
a otro pie causa un "mal apoyo al caminar" que puede generar
malformaciones en los pies de los niños, sobre todo de entre 3 y 8 años.
A
esa edad, los menores están en proceso de desarrollo, y los expertos
recomiendan a las familias escoger un calzado adecuado para su edad y
que no sea reutilizado.
"Aunque unos zapatos parezcan nuevos, si
han sido utilizados con frecuencia, se habrán adaptado a los pies de ese
niño, por lo que si pasa a usarlos otro podría alterar el desarrollo
normal de su pie", han apuntado.
"Si le duelen, camina incómodo
con estos zapatos o le causan alguna herida, el niño apoyará mal el pie
para caminar de una forma más confortable, y esto derivará en
deformaciones", según ha señalado el presidente del Colegio de Podólogos
de la Comunidad Valenciana, Alfredo Martínez.
Martínez ha
indicado que, para que un calzado usado pueda ser llevado por otro niño,
debe haberse utilizado "muy pocas veces", no estar deformado, no tener
pliegues en el empeine, que los refuerzos en la puntera y el talón estén
intactos y que el tacón y la suela no presenten desgaste.
Además,
ha recomendado que, si va a reutilizarse un calzado, se cambien las
plantillas, se sequen bien, si tuvieran humedad, y se desinfecten con
antifúngico.